Se ha procedido a la señalización de la finca Llano de la Toba y Rambla, situada en la pedanía de Zarcilla de Ramos, uno de los territorios mejor conservados del municipio.

La propietaria de la finca, Matilde Dolores Gimeno, acompañada de la delegada de ACUDE en las Pedanías Altas de Lorca de Marielia García, y de Pepe López Gimeno, pintor y director artístico del Paso Azul y de la Archicofradía del Resucitado de Lorca, persona muy vinculada personalmente a la zona, han estado colocando tablillas de la red de custodia del territorio de ACUDE.

Con más de 55 hectáreas, forma parte de la estepa cerealista de las Pedanías Altas de Lorca, un territorio rural tradicional de gran valor, con fauna silvestre muy singular en el que destacan las aves esteparias.

Es colindante con algunas parcelas en las que el fondo de inversión multinacional XElio  construirá una macroplanta solar que ocupará cientos de hectáreas, que cuenta con el desafortunado beneplácito del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) y de todos los grupos políticos del Ayuntamiento quienes, tristemente y de forma unánime, apoyaron el proyecto, y que alterará de forma irreversible el paisaje y destruirá parte del hábitat de especies tan raras en el contexto de la Región de Murcia como el sisón (Tetrax tetrax) y el cernícalo primilla (Falco naumanni), entre otras, además de contribuir a incrementar la «España vaciada» en unos parajes del norte de Lorca y sur de la vecina Caravaca con gran vocación ecoturística.

Además de la amenaza de las macroplantas solares, y de las líneas de alta tensión que evacuarán la energía producida, que no aportarán ningún beneficio a las pedanías pero que podrían hipotecar el futuro y devaluar las propiedades ajenas más próximas, esos parajes sufren la invasión incontrolada de macrogranjas porcinas y bovinas, para abastecer de cerdos y toros a importantes grupos empresariales de la comunidad murciana, que contaminan visualmente los territorios donde se implantan, además de sobreexplotar y despilfarrar un recurso tan escaso como el agua y existir la posibilidad de inundar de nitratos y otras sustancias contaminantes las aguas subterráneas, entre otros impactos socioambientales.

Este modelo de subdesarrollo insostenible es promovido activa o pasivamente por las autoridades municipales y por «conseguidores» vinculados a consultoras especialistas en la gestión de este tipo de proyectos que dañan tanto la salud de los habitantes del medio rural como provocan la devaluación de sus propiedades y su calidad de vida.

Por fortuna, todavía quedan propietarias como Matilde y nuestra delegada Marielia, entre otros miembros de ACUDE de esa y otras pedanías, que creen  que otro modelo es posible y que se puede compatibilizar el mantenimiento de la calidad de vida de los habitantes del medio rural con un modelo de desarrollo sostenible que no traiga pan para hoy y hambre para mañana matando a la gallina de los huevos de oro.

 

Mati Gimeno y Pepe López colocando una señal en una parcela preparada para la siembra de cereal.

Marielia y Mati junto al cartel.

Vista de Llano de la Toba y Rambla.

Terrenos donde se podría ubicar la macroplanta solar que ocupará cientos de hectáreas de hábitat estepario.

En primer término la finca integrada en la red de custodia del territorio de ACUDE, al fondo parcelas donde presuntamente se construirá la macroplanta solar.